Con motivo del Día Internacional de la Mujer, desde el Ayuntamiento todos los grupos nos hemos adherido, como cada año, al Manifiesto en favor de la igualdad entre hombres y mujeres.
Estos actos son valiosos pero hay que profundizar en el tema y formular propuestas concretas que proporcionen resultados palpables, por lo que el Partido Popular ha presentado la siguiente moción:
1. Fomentar el empleo femenino con el objetivo de alcanzar las tasas de empleo establecidas por la Unión Europea en la Agenda de Lisboa.
2. Combatir la discriminación salarial femenina.
El resultado, paradójicamente, ha sido el voto en contra de PSC, ICV y ER, con la abstención de CiU y el voto a favor de C’s.
¿Tan importante es ir contra cualquier propuesta del PP, que se saltan sus propios principios, llegando a ejercer políticas incoherentes, como votar en contra de aspectos que representan el despliegue de la ley orgánica 3/2007 de 22 de marzo, en la que se aprobó la Igualdad efectiva de Mujeres y Hombres?
Estoy segura de que muchos de los compañeros y compañeras presentes hubieran estado dispuestos a votar a favor de la propuesta pero, una vez más, nos topamos con presiones partidistas que nos perjudican a todos.
Una vez más, miramos hacia otro lado en vez de aunar esfuerzos como mujeres y hombres que luchan por los derechos humanos universales. Una vez más, se anteponen otros intereses en vez de poner en práctica las soluciones.
MARINA LOZANO
Estos actos son valiosos pero hay que profundizar en el tema y formular propuestas concretas que proporcionen resultados palpables, por lo que el Partido Popular ha presentado la siguiente moción:
1. Fomentar el empleo femenino con el objetivo de alcanzar las tasas de empleo establecidas por la Unión Europea en la Agenda de Lisboa.
2. Combatir la discriminación salarial femenina.
3. Garantizar el cumplimiento del artículo 45 de la ley de igualdad entre mujeres y hombres que establece que las empresas de más de 250 trabajadores tendrán que elaborar planes de igualdad.
4. Establecer políticas de conciliación de la vida laboral y familiar.
El resultado, paradójicamente, ha sido el voto en contra de PSC, ICV y ER, con la abstención de CiU y el voto a favor de C’s.
¿Tan importante es ir contra cualquier propuesta del PP, que se saltan sus propios principios, llegando a ejercer políticas incoherentes, como votar en contra de aspectos que representan el despliegue de la ley orgánica 3/2007 de 22 de marzo, en la que se aprobó la Igualdad efectiva de Mujeres y Hombres?
Estoy segura de que muchos de los compañeros y compañeras presentes hubieran estado dispuestos a votar a favor de la propuesta pero, una vez más, nos topamos con presiones partidistas que nos perjudican a todos.
Una vez más, miramos hacia otro lado en vez de aunar esfuerzos como mujeres y hombres que luchan por los derechos humanos universales. Una vez más, se anteponen otros intereses en vez de poner en práctica las soluciones.
MARINA LOZANO
